El Balcón del Tequendama: la nueva propuesta del alcalde de Soacha para reactivar el turismo en la zona
Recientemente, el alcalde de Soacha, Juan Carlos Saldarriaga, anunció un cambio de planes en su propuesta para reactivar el turismo en el Salto del Tequendama.
En entrevista con El Tiempo, el mandatario municipal confirmó que el megapuente de vidrio que se había planteado en un inicio, ya no se realizará por conflictos con el diseño.
«Ese puente tenía derechos de autor. Entonces generaba el ejercicio de una contratación directa y a dedo a una sola persona. Además, chocaba con el tema medio ambiental», manifestó.
A su vez, Saldarriaga aseguró que ya se tiene lista otra propuesta enfocada en el turismo pasivo y de avistamiento que tendrá por nombre: ‘El balcón del Tequendama’.
«‘El Balcón del Tequendama’ va a ser un proyecto absolutamente hermoso. Ese proyecto ya está en fase previa. Es un balcón mirador del Tequendama. Es un proyecto de avistamiento y de turismo pasivo, ya no es ese puente que habíamos proyectado desde un comienzo», recalcó.
Por su parte, María Victoria Blanco, directora de fundación, destacó que la propuesta debe estar enfocada en la protección del ecosistema de bosque de niebla que se encuentra en este lugar.
«Es un ecosistema de bosque de niebla. Son muy importantes porque son captadores de carbono, mitigadores del cambio climático. Es fundamental su protección”, adicional manifestó: “Pedimos evaluar opciones ambiental y paisajísticamente viables que correspondan a la importancia de este entorno. Aunque se aplauden las iniciativas que vayan en consonancia con recuperar el salto, debe existir un plan de manejo integral que respete sus valores históricos y que proteja un territorio tan frágil como este”.
‘El balcón del Tequendama’ será un mirador ubicado en la mitad del cañón que contará con un ascensor panorámico de vidrio de aproximadamente 70 metros de altura.
El mandatario aseguró que la estructura costaría unos $62.000 millones, es decir,$22.000 millones menos que el proyecto anteriormente planteado.
«Lo que se busca es que sea un proyecto más ambiental que turístico. Todos tenemos que unirnos en torno para que realmente se salve el río Bogotá. Esperamos estar inaugurando en octubre, noviembre del próximo año y queremos invitar a embajadores para que conozcan la condición de nuestro principal afluente entre el Magdalena y el Bogotá y podamos conseguir recursos para su descontaminación», agregó el Alcalde Saldarriaga.
Véase también: Tres bogotanos y una santandereana participaron en la primera misión análoga a Marte.
Fuente: El Tiempo