En la tarde de este lunes, el Gobernador Nicolás García anunció una nueva medida restrictiva en Cundinamarca como disposición preventiva ante la inminente llegada de la tercera ola de contagios en el país.
En esta Semana Santa, cerca de 1 millón y medio de vehículos transitaron por las carreteras del departamento, indicando un aumento del 60% en el turismo y por lo tanto en el contacto entre personas.
Lo anterior, podría desatar un aumento exponencial en las cifras de contagio, llevando al departamento a un colapso por insuficiencia en el sistema de atención médica.
Dadas estas circunstancias, el administrador departamental ha tomado la decisión de aumentar las restricciones para mitigar un poco el impacto por el alto flujo de turismo durante la Semana Santa.
Como primera medida preventiva, retornará el toque de queda nocturno desde las 12 de la media noche hasta las 5 de la mañana, a partir del 6 hasta el 19 de abril.
De igual forma, el gobernador manifestó que se aumentará el número de pruebas en todo Cundinamarca, principalmente en las ciudades que tuvieron mayor número de visitantes durante la Semana Mayor.
Por otra parte, en la capital, la Alcaldesa Claudia López decidió decretar nuevamente pico y cédula, acogiéndose a las recomendaciones del Gobierno Nacional.
Adicionalmente, la mandataria ordenó la suspensión de procedimientos de alta y mediana complejidad no covid-19 que exigen UCI y el aumento de la capacidad hospitalaria en todas las entidades.
En este momento se encuentra en estudio la posibilidad de volver a cuarentena general desde el próximo jueves 8 de abril desde las 10:00 de la noche hasta el lunes 12 de abril a las 4:00 am.
Véase también: Policía de Cundinamarca entregó balance de seguridad y convivencia en el departamento.
