El gobierno departamental, en consonancia con los criterios establecidos por el Instituto Nacional de Salud (INS), ha implementado las medidas pertinentes para hacer frente al reciente pico respiratorio de 2023, y alerta tanto a las autoridades de salud como a la comunidad sobre la necesidad de abordar adecuadamente esta situación.
Con base en la evaluación del INS, el país está experimentando un aumento en las infecciones respiratorias agudas (IRA), que incluyen casos de Covid-19, así como de otros virus estacionales como el sincitial respiratorio, enterovirus, rinovirus, adenovirus e influenza. Además, se ha observado la circulación de diversas variantes de la Ómicron, como la XBB identificada en marzo de 2023, que continúa presente, y la nueva variante JN.1, detectada desde la semana del 24 de diciembre. Cabe destacar que, si bien estas variantes de la Ómicron son altamente contagiosas, su capacidad para generar enfermedad grave, hospitalización y muerte es baja.
Ante esta situación, el ente gubernamental nacional realiza un seguimiento constante y análisis de los posibles riesgos para la salud, con el objetivo de supervisar, promover y proteger la salud pública en el territorio colombiano. En el caso del departamento de Cundinamarca, la Secretaría de Salud informa que ha habido un ligero aumento de infecciones respiratorias agudas durante la primera semana epidemiológica del año, pero hasta el momento no se han identificado casos de Covid-19.
No obstante, se hace un llamado a las entidades territoriales de los 116 municipios del departamento, así como a las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) y las Empresas Administradoras de Planes y Beneficios en Salud (EAPB), para que intensifiquen las acciones destinadas al control de las infecciones respiratorias agudas (IRA) y el COVID-19, siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Salud y Protección Social y el Instituto Nacional de Salud, según sus boletines 1 y 2 de 2024.
Entre las recomendaciones de la Secretaría de Salud de Cundinamarca se encuentra mantener al día todo el esquema de vacunación, especialmente contra el COVID-19 y la influenza. Se destaca que hay disponibles 7,000 dosis contra el COVID-19 para todas las personas cuya última dosis se haya administrado hace al menos 6 meses y que pertenezcan a grupos de alto riesgo, como la población mayor de 18 años con comorbilidades, el personal de salud y las personas mayores de 60 años.
Es fundamental tener presente que, ante cualquier síntoma respiratorio, se deben adoptar medidas de autocuidado y protección hacia los demás, como el uso de mascarillas, el lavado frecuente de manos, el distanciamiento físico y permanecer en casa, ya que estas acciones contribuyen de manera significativa a limitar la transmisión de virus respiratorios. La combinación de la vacunación y las prácticas preventivas personales es esencial para proteger a la población y frenar la propagación de estas enfermedades.
En caso de experimentar síntomas graves de infección respiratoria aguda por algún virus respiratorio, se aconseja buscar atención médica de inmediato y recibir tratamiento, especialmente en grupos de mayor riesgo, como niños menores de dos años y adultos mayores, mujeres embarazadas o en posparto, personas con morbilidades clínicas subyacentes, inmunosupresión y obesidad mórbida.
Se insta a la población a consultar información de fuentes confiables y a mantenerse alerta, siguiendo todas las recomendaciones emitidas por organismos oficiales como la OMS/OPS, el Ministerio de Salud y el INS, que monitorean constantemente los cambios epidemiológicos y las tendencias de circulación de virus respiratorios.
Véase también: Avanza construcción del Plan de Desarrollo Departamental 2024-2027