Es bien sabido que para envejecer sin complicaciones es necesario llevar un estilo de vida saludable, que incluya una buena alimentación y actividad física constante. Sin embargo, hay ciertos hábitos que pueden ser perjudiciales para la salud si se mantienen después de los 30 años.
Durante la adolescencia y el inicio de la edad adulta, el cuerpo puede soportar ciertas prácticas poco saludables, pero prolongarlas en la edad adulta puede aumentar el riesgo de problemas graves de salud en edades avanzadas. En este artículo detallamos los hábitos que se deben abandonar a los 30 años para preservar la salud.
A medida que envejecemos, nuestro cuerpo experimenta cambios debido a los daños celulares y moleculares acumulados a lo largo de la vida, que alcanzan su punto máximo después de los 60 años. La biblioteca de medicina Medline Plus indica que en la vejez, la mayoría de las personas experimentan una disminución en su estatura, peso corporal y masa muscular, así como en la densidad ósea. Además, la piel pierde elasticidad, lo que provoca la aparición de arrugas y flacidez.
Los adultos mayores de 60 años tienen mayores probabilidades de desarrollar enfermedades como el Alzheimer, Parkinson, diabetes, obesidad, degeneración muscular, artritis y osteoporosis. Sin embargo, es posible reducir estas probabilidades evitando ciertas actividades e implementando otras.
Los hábitos
Según el portal Clarín Internacional, existen seis hábitos en total que debes cambiar o poner en práctica a partir de los 30 años para impedir que el cuerpo se degenere más rápidamente y surjan determinadas patologías. Estos son:
1. Hacer ejercicio por lo menos una vez a la semana: el medio citado indica que jugar fútbol al menos un día a la semana y acompañarlo con un entrenamiento que ayude con la tonificación y el fortalecimiento muscular ayuda a que el cuerpo esté en mejores condiciones.
2. Dejar de fumar: aunque muchos hagan caso omiso, el tabaco es altamente perjudicial para la salud. Los expertos recomiendan dejar este hábito a los 30 años para impedir el desarrollo de enfermedades como el cáncer de pulmón, que puede conducir a la muerte.
3. Dormir a altas horas de la noche: según la fuente consultada, al llegar a los 30 trasnochar tiene mayores consecuencias, pues impide que el cerebro se recupere del estrés del día a día.
4. Decir no al sedentarismo: aunque muchas personas tienen un estilo de vida que les impide practicar algún tipo de actividad física a diario, es necesario realizar por lo menos 15 minutos de ejercicio al día para preservar la salud.
5. Comer saludable: aunque la comida rápida suele ser la opción más fácil de escoger, consumir este tipo de alimentos a diario no es nada beneficioso para el cuerpo. Procura comer sano al menos 5 días a la semana.
6. Cocinar con regularidad: para evitar el consumo de alimentos poco saludables altos en grados saturadas y azúcares lo ideal es preparar nuestros propios alimentos en casa. Implementando este hábito en tu vida podrías retrasar el envejecimiento.
Véase también: Estrella y un exoplaneta nombrados en honor a comunidad indígena U’wa
