Continúan los operativos para combatir el tráfico de flora y fauna silvestre
En plazas de mercado, parques y vías nacionales y departamentales, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) desarrolla operativos contra el tráfico de flora y fauna silvestre en Semana Santa.
En articulación con la Policía Nacional, la Corporación adelanta controles para hacerle frente a este delito que, según informa, es responsable de la extinción y disminución de varias poblaciones animales y forestales.
De acuerdo con la entidad, en esta época del año el tráfico de especies silvestres como la tortuga hicotea, la babilla, la iguana, el venado y los armadillos aumenta en la jurisdicción por el consumo de su carne y huevos, debido, principalmente, a creencias culturales.
“Esta situación genera un alto impacto en animales como las tortugas hicoteas que durante este tiempo están anidando y al ser atacadas por los traficantes en sus nidos corren un grave riesgo de extinción, pues su ciclo natural se ve interrumpido”, dijo Luis Fernando Sanabria, director general de la CAR.
Jahanna Castro, directora de la Regional Chiquinquirá de la CAR, zona donde se han desarrollado varios de estos operativos, aseguró que “las acciones continurán durante los días santos. Pondremos puntos de control en las plazas de mercado, parques y puntos estratégicos ya identificados”.
La funcionaria destacó que durante los operativos para combatir el tráfico de flora y fauna silvestre, los servidores de la CAR explican a conductores y pasajeros de vehículos particulares y de transporte público las implicaciones legales que causa la tenencia, uso y comercialización de cualquier especie silvestre.
“De acuerdo con la Ley 599 de 2000 esta conducta establece penas de prisión de 48 a 108 meses y multas hasta de 35.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes”, dijo Castro.
Por su parte, Sara Victoria Zarta, médica veterinaria de la Dirección Regional del Alto Magdalena, invitó a las personas que se desplazan desde las ciudades a pasar vacaciones en lugares de alta riqueza natural, a no comprar animales silvestres como loros y pericos para tenerlos como mascotas. “Adquirirlos fomenta su cacería, impacta negativamente su hábitat y también es un delito”, recalcó.
Cuidado en carretera
La funcionaria además hizo un llamado a tener precaución en las carreteras ya que los animales salen, habitualmente de noche, en busca de comida o refugio.
“Es importante recordar que nosotros somos los invasores de sus terrenos y por tanto debemos propender por salvaguardarlos. Adicionalmente, debido a las altas temperaturas y la deforestación, los animales están tomando hábitos nocturnos”, afirmó Zarta, quien explicó que esa región, que además concentra los municipios de mayor predilección turística, goza de una gran biodiversidad al encontrarse inmersa entre reductos de bosque tropical seco, humedales y el Río Magdalena.
“La deforestación, las quemas forestales, la construcción de viviendas sin planeación y la falta de educación son los principales factores que contribuyen a la tenencia ilegal de fauna silvestre en el Alto Magdalena”, aseguró.
La profesional informó que las zarigüeyas son las especies silvestres que más rescata esa dirección regional, y que el maltrato del hombre y el ataque de perros son la principal causa.
“Le siguen las serpientes, las aves de rapiña como el chimachima (Milvago chimachima), los pericos alibronceados (Brotogeris jugularis) y los loros amazonas por factores como las jaulas trampa y la accidentalidad”, afirma Zarta.
Durante la Semana Santa de 2021 fueron incautados 177 ejemplares de fauna silvestre, de los cuales 111 corresponden a aves, 42 a mamíferos y 24 a reptiles, según reportó la entidad.
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Texto: CAR Cundinamarca