5 señales de que tu gato está entrando en sus años dorados
Los gatos son seres notablemente inteligentes, cada uno dotado de habilidades y personalidades únicas. Mientras algunos son extremadamente activos y disfrutan explorando el mundo exterior, otros son más tranquilos y prefieren pasar el día descansando en un lugar seguro.
Cuando convives con gatos durante varios años, aprendes a reconocer sus comportamientos habituales. Sin embargo, con el tiempo, estos comportamientos pueden cambiar, señalando que tu querido felino está envejeciendo.
A medida que nuestros compañeros felinos entran en sus años dorados, pueden mostrar signos de envejecimiento que, si se detectan a tiempo, pueden mejorar su calidad de vida. Según expertos del portal Zooplus, los gatos pueden vivir hasta 15 años, pero esto depende de varios factores, incluyendo sus genes y estilo de vida. Una dieta adecuada y un estilo de vida saludable pueden retrasar los síntomas de envejecimiento, mientras que una mala alimentación o enfermedades pueden acortar su vida.
La opinión de expertos
Con esto en mente, aquí te presentamos cinco signos reveladores que podrían indicar que tu gato está envejeciendo. Es importante tener en cuenta que la edad en la que los gatos envejecen puede variar según su estilo de vida.
- Cambios en el pelaje: Al igual que los humanos, con el tiempo, los gatos pueden empezar a desarrollar un color de pelo más claro y perder brillo, lo que es un signo común de envejecimiento.
- Pérdida muscular: A medida que envejecen, los gatos pueden experimentar una disminución en su masa muscular y problemas de estabilidad postural. Enfermedades como la artrosis también pueden afectar negativamente su condición física.
- Cambios en el comportamiento: Los gatos mayores pueden mostrar comportamientos inusuales, como desorientación debido a la pérdida de visión y audición, micción repentina dentro de la casa, fatiga, pérdida de memoria y disminución del apetito y la ingesta de agua.
- Problemas de obesidad: Los gatos mayores, al volverse menos activos, pueden aumentar de peso. Es crucial controlar su alimentación para garantizar que reciban los nutrientes necesarios sin excederse en calorías.
- Problemas dentales: Los gatos mayores son propensos a problemas dentales como sensibilidad, acumulación de sarro, gingivitis y estomatitis. La pérdida de dientes con el tiempo puede dificultar su capacidad para comer adecuadamente.